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18. RECIBIR UN PAQUETE


La frase "recibir un paquete" creo que no es del agrado de nadie, por motivos obvios no necesita ningún tipo de explicación, la frasecita lo explica todo, consiste en recibir un castigo, una bronca, un rapapolvos y hay que ver como cambian las cosas, esta misma expresión hace ya algunos años, consistía en recibir una gran alegría por mediación de Correos, era recibir el esperado paquete, aquel paquete bien liado en tela y cosida una cartulina con tu nombre y tu dirección de la Universidad, aquello que te mandaba tu familia no sin sacrificio y con todo el cariño, en el las latas de conservas, el salchichón y otros pequeños alimentos mas y que esperabas con una ilusión desde el momento que te anunciaban que ya lo habían remitido que ahora no puedes describir.

Todos los días se recibían varios en el Colegio, los recogíamos en la oficina de la dirección y entonces los guardábamos en el aula hasta esperar a la noche a que subiéramos a los dormitorios para guardar su contenido en nuestro armario y los que no éramos afortunados solo nos quedaba mirar con cara de envidia a los agraciados.

Sin embargo y para mi pesar, no olvidaré que por culpa de un paquete que puso mi madre, al ir a la oficina de Correos del pueblo, debido a la nevada que había en esos momentos sufrió una caída y se rompió una pierna, maldita casualidad, también recuerdo que mi madre siempre me enviaba en un huequecito una bolsa de "Conguitos", que recuerdos esto últimos con tan poca significancia pero cuanto me gusta recordarlos.

Era espléndido "recibir un paquete", aún creo ver a los encargados de ir a la estafeta a recogerlos y bajar a los Colegios cargados de ellos y alrededor de los mismos los que esperaban alguno, pulular por su lado para observar si eran los afortunados, maravillosas esas vivencias, el recuerdo es mucho mas recuerdo cuando intentas recordarlo.

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